martes, 18 de marzo de 2014

UNA NUEVA ÉPOCA, UN NUEVO MUNDO (18-3-2014)

Todo empezó un 9 de mayo del 1966, bien, mejor dicho 9 meses antes, cuando me engendraron. Una tarde soleada del mes de agosto, en una siesta aunque no lo sé con seguridad. No tiene ninguna importancia. Lo cierto es que allá se inició una nueva vida en esta realidad. Llevo unas 800 y pico reencarnaciones en esta realidad y en otras, y de estas unas 3 o 4 reencarnaciones estuve en guerras galácticas ninguna de de las cuales me generó ningún tipo de satisfacción interna. Creo que fue entonces que viendo que no caminaba o evolucionaba decidí venir aquí, a este mundo.


Era una oportunidad única. Era fantástico. Había amor, creación, belleza por todas partes, donde era posible crear y experimentar en nuestra esencia cualquier cosa que quisiéramos y así fue durante muchas existencias. Pero al ir experimentando vibraciones más densas, parte de lo que se experimentaba quedaba y se fue distorsionando el mundo, incluyendo las sensaciones, emociones más densas y incorporando y creándose un pseudo ego, una construcción energética alterada de la realidad, un filtro que hacía ver la realidad polarizada sobre lo que sucedía en función de las experiencias experimentadas en cada individuo-esencia. Poco a poco el punto de vista único del amor y de conexión con DIOS y, por tanto, de alineación con el propósito único de Dios se fue separando del propósito individual de cada ser hasta llegar a la polarización total.


En aquella época había seres que continuaban en comunión con Dios, desde una vibración algo más baja que la inicial. Sabían que la humanidad iba caminando hacia su destrucción y fueron preparando la forma en la cual las almas pudieran, después de este descenso, volver a experimentar la grandeza de Dios, la de sus inicios en este mundo. No sabían con seguridad cual sería este recorrido de desintegración, pero que volveríamos de una forma u otra al camino de la luz. Por esto fueron salvaguardando su conocimiento en diferentes sitios, en cajas energéticas selladas con luz y guardadas para su descubrimiento cuando la humanidad volviera a estar preparada.


La caída de la humanidad fue desastrosa. No se esperaban que esta fuera tan fuerte como lo fue. Otras razas intergalácticas aprovecharon para poner sellos de control en los humanos para que no pudiéramos brillar y recuperar nuestra luz. Pusieron limitaciones en diferentes centros energéticos que impidieron que en poco tiempo pudiéramos volver a recuperar la grandeza. Estas razas se pusieron en contacto con diferentes facciones (grupos-familias) de la Tierra para que desde nuestra realidad también controlasen e impidiesen la evolución del ser humano y pusieran impedimentos a su crecimiento. Los momentos más bajos fueron pocas centurias después del cataclismo, cuando la Lemuria y la Atlantida se hundieron. Grupos de supervivientes consiguieron escapar a este control iniciando nuevos asentamientos e intentando guardar y estructura el conocimiento heredado. Pero como la vibración general del mundo y el comportamiento de la Tierra era retrógrado esto llevó poco a poco al olvido y a las vidas de supervivencia sin sentido, esperando que llegasen momentos más favorables para el nuevo despertar.

Un grupo de seres consiguieron aislarse de la baja vibración generada y manteniéndose en su 5ª dimensión, continuaron evolucionando con gran tristeza por lo que había sucedido pero, con la profunda aceptación de que era el camino que Dios había marcado para que sus hijos pudieran evolucionar. Como los cogió por sorpresa las limitaciones energéticas que pusieron a la humanidad y la modificación del ADN que hicieron para tenernos controlados, idearon una solución para que la humanidad, cuando los tiempos fueran más favorables, pudiera volver a su punto de luz. Grandes seres de la galaxia se implicaron en esta nueva ruta. Muchas civilizaciones interplanetarias que habían llevado a hijos suyos a este planeta para su evolución y que aun, por nuestra limitada consciencia temporal no podemos recordar, reaccionaron comprometiéndose en la ayuda.


Y aquí estamos limpiando nuestro ADN, nuestro cuerpo de emociones y sentimientos de vibraciones bajas con la ayuda de estos seres de luz que nos acompañan en este despertar. Trabajando para limpiar nuestra esencia de traumas y bloqueos de vidas pasadas con el objetivo de llegar a la vibración que nos corresponde y recuperar nuestra capacidad multidimensional. Por esto, es necesario borrar de nuestro ADN y de nuestra energía cualquier registro de baja vibración. ESTE ES EL TRABAJO QUE NOS TOCA, LIMPIARNOS, igual que cuando vamos a la ducha y nos limpiamos, tenemos que limpiar nuestra energía para poder subir la vibración y recuperar nuestro poder como seres de luz que somos. Para esto es necesaria nuestra implicación en este proceso de evolución.


Es necesario recordar que la única vibración que puede quedar es la del AMOR hacia  nosotros y hacia todos nuestros hermanos, sea cual sea su raza, color, sexo o creencia. No tiene importancia, ninguna cosa terrenal (3ª dimensión) tiene importancia. SOLO EL AMOR QUE NOS PROFESAMOS Y QUE PROFESAMOS A LA VIDA es el que nos llevará a vivir nuevas singladuras que desde nuestra limitada capacidad de 3ª dimensión no somos ni capaces de imaginar.


UN ABRAZO A TODOS LO SERES HUMANOS.

Canalizado a través del YO SUPERIOR